Jacinto Chicharro Santamera, 23 de junio de 2018,
mientras se inaugura en Atienza la biblioteca Luisa de Medrano.
Ahora aquí me descamiso para sintetizar todo aquello pero sin rigidez académica.
Semejanzas y diferencias entre Juno, Ceres y Psique y Marco Dente da Ravenna y Sibilas de Juan Soreda.
¿Quién será la Mujer de Rojo?
¿Y la familia qué tal?
¡A saber que artes promocionaran allí estas cortesanas! pensarían los rancios del Cabildo.
¿Para una capilla funeraria?
Me encorbaté para argumentar que tenemos en Atienza el
retrato de una catedrática notable. Fueron varios artículos y una conferencia.
Destaco, entre los artículos, los publicados en 2014 en los números 65, 66 y 67
de "Atienza de los Juglares". Sigue una referencia de todos: https://www.facebook.com/jacinto.santamera/posts/1714434855260914
Ahora aquí me descamiso para sintetizar todo aquello pero sin rigidez académica.
Luisa López de Medrano de Bravo de Lagunas y Cienfuegos de la familia de los alcaides del castillo de Atienza, fue una mujer culta como tantas otras que se criaron junto a la reina Isabel la Católica.
Tras la derrota de los Comuneros se borraron las huellas de
estas mujeres ilustres. La reina Juana (loca?) fue la más machacada. En 1530 el
nombre de Luisa de Medrano aún aparece en algún ejemplar que escapó de la quema
de la enciclopedia titulada “Cosas memorables de España” que el
emperador Carlos V mandó retirar. En las dos siguientes ediciones -en latín y
castellano todas- se suprime, entre otros, el nombre de esta "doncella elocuentísima".
Todo rastro desapareció después. Solo perduró la fama.
En 1934, durante la II República, Therese Oettel llegó desde Alemania para investigar su historia. En
internet, se puede consultar su tesis. Poco nuevo se ha añadido a aquella
biografía, excepto que nació en Atienza y no en el castillo de San Gregorio de
Soria. Identificar su retrato contribuirá notalmente a su conocimiento. http://www.cervantesvirtual.com/obra/una-catedratica-en-el-siglo-de-isabel-la-catolicaluisa-lucia-de-medrano/
Nada sabía yo de la catedrática cuando, ya de niño, me sentía interpelado por una Mujer de Rojo que se contorsiona para mirarte. La sentía más viva, más real que cualquier otra persona pintada. Con el tiempo me fui impregnado de arte y aprendí a intuir que no es lo mismo un retrato tomado del natural que uno copiado de otra pintura. Quien contemple serenamente la tabla "Sibilas de Atienza" sentirá que una de las tres tiene como un aire propio… vamos, que es un retrato.
A mis alumnos de Historia del Arte les hacía analizar obras siguiendo
un esquema que yo, poniéndome de ejemplo, aplique a esta tabla. Ya puestos,
seguí analizándola más allá de lo académico. Encontré modelos en los que se
inspiró el autor para la composición y para pintar la cara de las otras dos sibilas,
pero de la Sibila de Rojo no encontré referentes. Publico las imágenes que
confirman que dos sibilas comparten genes con otras pinturas, pero la tercera no
tiene parientas. No te extrañes, en el Renacimiento es tan normal copiar
grabados como acoplar el retrato de la amante a un cuadro de época.
Semejanzas y diferencias entre Juno, Ceres y Psique y Marco Dente da Ravenna y Sibilas de Juan Soreda.
¿Quién será la Mujer de Rojo?
"Una empanà, una empollona" me respondió una adolescente. Y lo parece: no tiene bastante con un libro, que lleva otro bajo el brazo. Claro que como representa la Sibila de la isla griega de Samos, tiene su lógica: va de filósofa. En mi estrechez masculina no se me ocurrió entonces pensar en catedráticas.
¿Cuántos años le echas? Pregunté a otra Sonia. "Cuarenta y tres, como yo" sentenció. Me quedé 'pasmao'. Entonces yo ya calculaba que Luisa de Medrano se había muerto a esa edad, y que el cuadro se había pintado en 1527, cuando el pintor, Juan Sureda acabó el retablo de Sta. Librada en Sigüenza, y antes de iniciar con esa maravilla de Olivares del Duero en 1532.
¿Y la familia qué tal?
Pues por el testamento de su madre, Dña. Magdalena, se sabe
que en diciembre de 1527 Luisa ya había muerto y su hermano Luis también. Entonces
la altiva señora que sirvió a las reinas Isabel y Juana y un hijo, el pendenciero
alcaide, se chuleaban frente al Cabildo de Clérigos. Mientras su hermana
Catalina remodelaba la capilla funeraria familiar en el convento de san Francisco.
(Ojo, no confundir con otra capilla funeraria que la misma familia tiene en
Berlanga, donde está enterrado el padre del comunero Juan Bravo).
¡A saber que artes promocionaran allí estas cortesanas! pensarían los rancios del Cabildo.
Pero ellas tenían criterio, riqueza y causa como para ser
las mecenas de "Profetas y Sibilas". Tienen dos ilustres difuntos
recientes, ambos catedráticos de Salamanca, memorables personajes muy dignos de
pasar a la Historia. ¿Y si representamos a Luisa como sibila
griega y a Luis como profeta Jeremías con gorro troyano? Porque llevarlos a
Atienza aunque hubiesen muerto -supongamos- en Salamanca o en Coria, ni se
dudaría, pues para los muertos de entonces la distancia no era problema: al
padre y al abuelo los trajeron desde Granada.
Estas señoras mecenas eran muy de papeles: ¡dejaron cada
testamento! Seguro que al pintor le hicieron firmar un contrato muy
pormenorizado. Es la prueba empírica que falta: ¡estamos sin papeles! ¿Ocultarían
ellas documentos ante los aires flamencos del emperador que decapitó al
pariente comunero y que quemaba todo lo que escribía su propia madre, la rebelde
Juana, a quien ellas cuidaron? Quizás, porque eso del martirio de la patrona de
Catalina decapitada como Juan Bravo bajo el águila bicéfala es sospechoso
(también esta pintura está en el Museo de San Gil, al entrar). Más bien ceo
que, como un siglo después estas cuatro tablas ya son propiedad del Cabildo de
Clérigos, pues… quizás se extraviaron los papeles.
La sibila Frigia
de Soreda es copia de su Sta. Librada de Sigüenza
y refrente para su San Juan Evangelista de Olivares del Duero
y refrente para su San Juan Evangelista de Olivares del Duero
A la
Psique del grabado la trasforma en Cúmea con pocos cambios.
Samia no
tiene referentes y su belleza no es 'de pasarela'.
¿Para una capilla funeraria?
Solo por exigencias del guión un pintor que se lució en
Sigüenza haciendo paisajes volverá a la moda anterior de fondos dorados. Iluminados
entre velas les dan misterio, y como el oro no se oxida expresan mejor lo
eterno. Tate! de ese fondo, como viniendo del más allá emerge la potente mirada
de la catedrática. Me costaba admitir que entre tanta perfección nos pintasen a
una mujer de culo, con la falta de decoro que implica… incluso ahora, el uso
esta palabra. Claro que, situada allí en la capilla funeraria del lado del
camino, representar a una muerta que vuelve la mirada nostálgica a los vivos,
es arte.
¿Dónde podían estar mejor
-este arte y aquellos muertos- que en el convento de los franciscanos? Ellos fueron
los confesores de la reina y los preferidos del púbico a la hora de las pompas
fúnebres. Además estaban enemistados con el Cabildo -como el alcaide y su
madre- y tenían la misión de convertir a los judíos camuflados
¿Judíos? (judaizantes, para ser precisos)
En Atienza había muchos. Manuel Martín Galán nos habló de ellos, casa por casa. 'Soreda' el apellido del pintor lo es. Sus "Profetas" rezuman judaísmo: por el tema, el mensaje, los perfiles, las filacterias y su correcto hebreo. Sería lógico que quien pagó las cuatro cabalísticas tablas también lo fuese.
En Atienza había muchos. Manuel Martín Galán nos habló de ellos, casa por casa. 'Soreda' el apellido del pintor lo es. Sus "Profetas" rezuman judaísmo: por el tema, el mensaje, los perfiles, las filacterias y su correcto hebreo. Sería lógico que quien pagó las cuatro cabalísticas tablas también lo fuese.
Pero eso no me encajaba con los Medrano, protegidos por la
reina que expulsó a los judíos. Pero, ¿por qué no imaginar que la familia del
alcaide de Atienza había sido judía? Eso me conectaría todos los cables: el
tema de los profetas, la oposición del Cabildo, los franciscanos, cierto
secretismo… e incluso la presencia de las sibilas buenas sacerdotisas paganas que
ellos admiran desde el siglo I.
Me apareció entonces una cita que transcribe Paloma Alonso
Sigüenza, del último equipo de restauración: "El 22 de enero de 1498 se
apremia a la mujer, hija (Dña. Magdalena) y testamentarios de García Bravo,
celebre alcaide de Atienza, para que entreguen ciertos libros al judío Yusef de
Madrigal". ¡Judíos, judíos!
¿Judíos sin estrella? Si eran judíos estaban limpios. Al
apostar por los vencedores en el asalto con alevosía y nocturnidad de Atienza
durante la Guerra Civil y al morir el abuelo y el padre matando moros en
Granada, seguro que les aseguró la limpieza de sangre y -como ya sabemos por
papeles- la protección de la viuda y las huérfanas. Por eso medraron, claro.
Apenas tenemos escritos de la época, pero SÍ pinturas para
leer y datos para ensamblar.
Recapitulemos: Retrato de cuarentona culta y de mirada sabia;
con una especie de areola que viene a decir "Made in Dios" recordando
los piropos que le dedicó en vida Lucio Marineo Sículo; conservado milagrosamente
en su propio pueblo; financiado por su culta hermana y valiente madre; pintado
por el mejor pintor de la diócesis sin la supervisión del obispo; silenciado por
judaizante y femenino; pero de tal
calidad que lo recicla un Cabildo aunque no comulgue con su filosofía… En
definitiva: 'blanco, en botella, huele a leche, sabe a leche' ¿Qué será? La
leche! Se busca la etiqueta que lo niegue o lo confirme.
Aunque nos falte el contrato, tenemos publicidad antigua: Tomás
Gismera Velasco recientemente comentó que "Un retrato en tabla, que
refleja su fisonomía (de Luisa de Medrano), se cita entre los archivos de la
biblioteca de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid,
sin que se conozca a su autor".
Pero, pero… en Bochones me queda otro cabo suelto, ¿Qué
pintan otras sibilas encaramadas al retablo y una copia de época de
"Profetas y Sibilas"?
¿Mera hipótesis? No.
Tesis.
Verdad provisional hasta que sea refutada, falsada como diría Karl Popper
Verdad provisional hasta que sea refutada, falsada como diría Karl Popper
3 comentarios:
Ruego opinión sobre este estudio:
Beatriz Galindo y Lucía de Medrano: ni maestra de reinas ni catedrática de derecho canónico. https://revistas.uva.es/index.php/invehisto/article/view/3878/3058.
Enlace al vídeo de la conferencia dictada en el Casino de Salamanca el 14 de octubre de 2019, en la que se ofrecen más datos sobre el tema :https://www.youtube.com/watch?v=mCdhUwHZ2lM.
Me honra que una profesional pida opinión a un diletante. Lamento, no obstante, no haber visto en su día este comentario, del que he sabido gracias a un aviso de Águeda, la factótum del blog.
Dra. Carabias, le felicito sin reserva por su investigación y por su energía en defenderla. Ciertamente, la cuestión de género y -añado- el patriotismo de terruño nos han inflado la figura de Luisa de Medrano. Es necesario desmitificarlo con datos -como Ud. hace- para encontrar a la persona, quizás más sorprendente que el propio mito.
Mi estudio iba por otro camino: desde mi infancia me sentía mirado por la Sibila Samia y quise saber quién podría ser la modelo. Así encontré a Lisa de Medrano, hermana de Catarina, mecenas en Atienza.
Como mi fuente primaria era la tabla de Soreda, para saber si la retratada era Luisa de Medrano me basé en fuentes secundarias. Ante tanta literatura ampulosa, desbrocé todo para quedarme solo con tres fuentes primarias. Entonces, con la pretensión de aportar una cuarta, me centré en un estudio iconográfico e iconológico de la Sibila Samia.
Para mí ha sido motivo de satisfacción ver el probable retrato pintado por Soreda proyectado durante su rotunda conferencia en Salamanca. Pero la Ciencia avanza también falsando y Vd. así colabora y también está a un paso de desmentirme si demuestra que Luisa de Medrano murió hacia 1515. Entonces tendríamos que buscar otra mujer con poderío, de unos 43 años, pues la mujer de rojo, retrato lo es.
Me quedan dudas:
Si no se encuentran más fuentes primarias sobre aquellas mujeres es porque ¿ellas no fueron significativas? ¿se han perdido los documentos? ¿o ben es por qué estos fueron destruidos tras la llegada de la corte flamenca de Carlos I?
Si en los archivos de las iglesias de Atienza están minuciosamente documentadas todas sus propiedades ¿por qué durante más de un siglo no se conservan datos sobre “Profetas y Sibilas”?
Gracias por su atención.
Cordialmente.
jacintochicharro@gmail.com
Qué desagradable la alumna que dijo "una empaná, una empollona"… Así se valora el conocimiento en la sociedad actual. Una lástima.
Publicar un comentario